Lemay Farradá Socorro viajó desde Cuba a Dominica en una misión médica. Cuando regresó a su paÃs en 2017, lo hizo con la determinación de marcharse definitivamente para buscar una vida mejor. La exposición a una realidad diferente a la que le habÃan contado sobre el mundo exterior transformó su perspectiva.
El Gobierno cubano le pagaba apenas una quinta parte del salario que generaba en Dominica, pero esta fracción representaba alrededor de 18 veces más que el pequeño sueldo que devengaba en su tierra natal.
Un amigo lo motivó a emigrar a la República Dominicana y asà comenzó el largo proceso para obtener la baja del sistema de salud cubano. "Hay muchos médicos en el mundo que abandonan la misión, porque ven que se puede vivir de su trabajo en otro paÃs, que es lo que tú, hasta que no sales, no sabes", comenta Farradá, especialista en imágenes médicas.
El cubano Lemay Farradá Socorro es licenciado en TecnologÃa de la Salud, especialidad Imágenes Médicas. Trabaja en el Centro Médico Dominico Cubano. (NEAL CRUZ)
La prolongada crisis económica en Cuba, marcada por la escasez de alimentos, medicinas, apagones constantes, inflación descontrolada y salarios Ãnfimos, ha empujado a miles de profesionales a buscar una salida fuera del paÃs.
En 2024, el Gobierno cubano aplicó un aumento salarial para más de 400,000 médicos, enfermeros y técnicos, con el objetivo de frenar la fuga de especialistas y retenerlos en los hospitales.
El Diario Las Américas informó que un cardiólogo pasó de ganar 6,500 pesos cubanos a 17,000, equivalentes a 54 y 141 dólares, respectivamente, según la tasa oficial. Sin embargo, al calcularse con el valor del dólar en el mercado negro de ese momento, la cifra real era de apenas 21 y 56 dólares.
Otro incremento salarial, dispuesto en abril de 2025, tampoco resultó significativo. Según el Periódico Cubano, equivale a menos de 20 centavos de dólar por cada guardia nocturna.
La frustración de los médicos por no poder cubrir necesidades básicas, junto a las limitaciones polÃticas y la falta de libertades individuales, se convierte en un potente motor de emigración.
Estos doctores, considerados desertores en su paÃs, se dispersan por América Latina y Estados Unidos, y muchos terminan en la República Dominicana, aunque las autoridades nacionales no llevan registros oficiales de cuántos ejercen actualmente en su jurisdicción.
Sin embargo, la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), encargada de revalidar los tÃtulos de médicos extranjeros, reporta haber entregado diplomas a 55 facultativos cubanos entre 2015 y el 31 de marzo de 2025.
En tanto, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (Mispas) informa que 84 profesionales cubanos en distintas áreas médicas obtuvieron su exequátur en el mismo perÃodo.
En ese grupo también figuran cubanos residentes que estudiaron en República Dominicana. Incluye 67 doctores en Medicina, cinco odontólogos, tres estomatólogos, tres veterinarios, dos psicólogos, dos licenciados en farmacia, un terapeuta fÃsico y un quiropedista.
Hasta 10 años
El proceso para desvincularse del Estado cubano y obtener acreditación en República Dominicana puede tomar hasta 10 años. Un testigo de ello es el cirujano Ricardo Gutiérrez Pantoja.
El cubano Ricardo Gutiérrez Pantoja es cirujano y especialidad en medicina general integral. Trabaja en el Centro Médico Dominico Cubano. (NEAL CRUZ
Su vÃa de salida fue el matrimonio con una dominicana. Después de la boda, esperó seis años en Cuba para completar el trámite migratorio, cumpliendo con una especie de "castigo" que el Gobierno impone a los médicos que deciden abandonar el paÃs.
"Es como una regla que ellos tienen allá, que cuando uno es médico tiene que cumplir alrededor de tres a cinco años. De esos, cumplà seis", dice el doctor.
Gutiérrez, especialista en Medicina General Integral, trabajó en una misión en Zambia entre 1990 y 1992, donde le sorprendió el nivel de vida de sus colegas africanos. "Siempre tuve la idea de irme de Cuba, en realidad yo querÃa irme para cualquier parte", confiesa.
Una vez en República Dominicana, el reto para los médicos emigrados es mantenerse económicamente mientras atraviesan las distintas etapas del proceso de convalidación, que puede durar cuatro años.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario